Niños indisciplinados

Manual para criarlos con disciplina

Por Dra. Nancy Álvarez

Nadie nos enseña la tarea más hermosa e importante que la vida nos da: ser padres. Compramos un electrodoméstico y nos dan las instrucciones ¿Quién le dio el manual de ser padres, cuando nació su hijo? Nadie. Sin embargo, se espera que usted sea efectivo, la felicidad futura de su hijo está en sus manos, también la responsabilidad de un ser que no sabe usted qué papel desarrollará en la sociedad.

La estabilidad emocional y lo que un niño sea en el futuro, es lo que nos dice si fuimos buenos padres. No importa si el niño fue educado por ambos padres o por uno, lo que mide el éxito es que sea alguien que realmente aporte a la sociedad en que se desarroll y que sea un ser armonioso y estable emocionalmente.

Sabemos que los padres tienden a educar y disciplinar a sus hijos según ellos fueron educados y disciplinados, por sus padres… y sus padres a su vez por cómo lo hicieron sus padres, o sea, seguimos educando a nuestros hijos como lo hacían nuestros tatarabuelos. ¿Podría eso tener algo negativo? Yo le diría que mucho, educar un hijo es hoy una ciencia, sabemos qué se debe hacer, lo que no se debe hacer y por qué… pero esto ha sido el secreto mejor guardado del mundo, hasta ahora, se lo prometo.

El término disciplina es un derivado de discípulo: una persona que aprende. Entonces disciplinasignifica enseñar y entrenar, es parte de tu labor como padre.

Las metas de una buena disciplina son:

Fomentar  conductas apropiadas
Promover la armonía entre las personas
Prevenir futuros problemas a medida que el niño crece
Instalar un sentido permanente de autodisciplina

¿Por qué la disciplina es importante?

Porque es lo que determinará la manera en que su hijo se comportará.
La disciplina es importante en el presente y en el futuro.
A diario, padres e hijos se enfrentan a los retos impuestos por la disciplina.
Una disciplina apropiada y consistente puede hacer la vida más fácil y agradable para usted, su hijo y el resto de la familia.
El manejo de la disciplina en su familia determinará la clase de adulto en que su hijo se convertirá. La disciplina ayudará a su hijo a tener más confianza en si mismo y a ser más responsable.

La disciplina es un proceso continuo que:

Empieza a temprana edad
Implica adaptación a medida que el niño madura
Continúa hasta que el niño se hace adulto, convirtiéndose en autodisciplina

La disciplina ayuda a :

Desarrollar el auto-control: Los sentimientos de ira, impotencia, el temor y los celos son naturales en determinados momentos. Pueden emanar como rabietas, lloriqueos o peleas. Los padres deben ayudar a sus hijos, con tranquilidad y firmeza, en el manejo constructivo de estos sentimientos.

Respetar los derechos de los demás: Todo el mundo tiene derechos a su privacidad, a que se les trate con consideración y a que sus pertenencias sean respetadas. Los niños deben ser enseñados a decir por favor y gracias, a tocar antes de entrar a una habitación, y a respetar los derechos de los demás. El aprender las habilidades sociales ayuda a los niños a llevarse mejor con las personas que los rodean.

Expresar sus emociones: Los niños deben ser enseñados a expresar sus emociones de manera adecuada. El conversar acerca de sus sentimientos y de las emociones en general, pueden servir de ayuda en la prevención de malos entendidos y resentimientos que pudieran ocasionar problemas posteriores en la vida del niño.

Desarrollar su autoestima: Los niños necesitan que se les alabe y  le presten atención cuando se comportan bien y cuando actúan responsablemente. Esto refuerza positivamente la imagen que tiene de sí mismo.

Tener confianza en ellos: Los niños necesitan aprender a cuidarse a sí mismo (vestirse, bañarse, etc.) y a hacer tareas domésticas simples y adecuadas a su edad. El dominio de estas habilidades es el primer paso hacia el desarrollo de la confianza en sus propias destrezas y capacidades.

Desarrollar el sentido del orden: Los niños necesitan aprender buenos hábitos de trabajo para que puedan funcionar exitosamente en el hogar, la escuela y, de adultos, en el trabajo. Los olvidos frecuentes, la holgazanería constante y el desorden repetido no deben ser excusados como parte de la personalidad del niño.

*No te pierdas la segunda parte de este artículo, la cual te ayudará a entender por qué tu hijo se porta mal: Razones y soluciones para que sea un hijo disciplinado.  Para más información de la Dra. Nancy Álvarez visita www.nancyalvarez.com