depresión

Adiós a esos días tristes

Sumergida en la depresión: «Realmente me costaba mucho salir de la cama por las mañanas. Yo solo quería esconderme debajo de las sábanas y no hablar con nadie. No tenía ganas de comer y perdí mucho peso.Ya nada me parecía divertido. Estaba cansada todo el tiempo y no podía dormir bien de noche. Sabía que tenía que seguir adelante haciendo mis cosas porque tengo hijos y un trabajo, pero me parecía imposible poder hacerlo, sentía que nada iba a cambiar ni mejorar.

Comencé a faltar al trabajo y una amiga notó que algo andaba mal. Me contó que durante un tiempo ella también había estado muy deprimida y que obtuvo ayuda de su médico. Llamé a mi médico y le conté cómo me sentía. Me hizo ir para examinarme y me dio el nombre de un especialista experto en el tratamiento de la depresión.

Ahora veo periódicamente al especialista para recibir terapia de ‘diálogo’, la cuál me ayuda a aprender maneras de lidiar con esta enfermedad en mi vida diaria y estoy tomando medicamentos para la depresión. No todo mejoró de un día para el otro, pero ahora me siento más capaz de disfrutar de la vida y de mis hijos».

 

Carta anónima de una mujer deprimida y si de una manera u otra te identificas con esta situación, es momento de entender el estado de depresión y buscar ayuda. A continuación, te ofrecemos información de esta condición y cómo puedes enfrentarla.

Depresión: cuando la melancolía no desaparece

Ocasionalmente, todos nos sentimos melancólicos o tristes pero estos sentimientos, por lo general, desaparecen en unos días. Cuando una persona tiene depresión, ésta interfiere con su rutina y vida diaria; por ejemplo ir a trabajar o a la escuela, cuidar niños, y en las relaciones con la familia y los amigos. La depresión es dolorosa tanto para la persona que la padece como para quienes se preocupan por ella.

La depresión puede manifestarse de maneras muy diferentes en diferente gente o en la misma persona con el pasar del tiempo. Es una enfermedad común pero grave. Un tratamiento puede ayudar a mejorar aún a aquellos con los grados más graves de depresión. Se trata de una enfermedad común pero grave. Un tratamiento puede ayudar a mejorar aún a aquellos con los grados más graves de depresión.

¿Cuáles son los síntomas de la depresión?

  • Sentimientos continuos de tristeza, ansiedad, o vacío
  • Sentimientos de desesperanza
  • Sentimientos de culpa, inutilidad, o impotencia
  • Sentimientos de irritabilidad o inquietud
  • Pérdida de interés en las actividades o pasatiempos que antes disfrutaba, incluyendo las relaciones sexuales
  • Sensación de constante cansancio
  • Dificultad para concentrarse, recordar detalles, o para tomar decisiones
  • Incapacidad para dormir o permanecer dormido (insomnio); posibilidad de despertar en plena noche o dormir todo el tiempo
  • Comer excesivamente o perder el apetito
  • Pensamientos suicidas o intentos de suicidio
  • Dolores y malestares persistentes, dolores de cabeza, cólicos, o problemas digestivos que no desaparecen

No todos a quienes se diagnostica depresión presentan estos síntomas. Los signos y síntomas pueden ser diferentes en hombres, mujeres, niños jóvenes, y ancianos.

¿Cuándo comienza la depresión?

Los niños pequeños y los adolescentes pueden padecer de depresión, pero también puede ocurrir a otras edades. La depresión es más común en mujeres que en hombres, pero hombres también la padecen. La pérdida de un ser amado, el estrés, los cambios hormonales, o eventos traumáticos pueden desencadenar a la depresión a cualquier edad.

¿Por qué se sufre de depresión?

No existe una causa única de la depresión. La depresión ocurre por una combinación de factores, entre ellos, los siguientes:

Los genes – algunos tipos de depresión tienden a transmitirse de generación en generación. Los genes son el «diseño» de quiénes somos y los heredamos de nuestros padres. Científicos están buscando los genes específicos que pueden estar relacionados con la depresión.

La química y estructura del cerebro – cuando las sustancias químicas del cerebro no están en los niveles adecuados puede ocurrir la depresión. Estas sustancias químicas, llamadas neurotransmisores, ayudan a las células del cerebro a comunicarse entre sí. Al observar imágenes del cerebro, científicos también pueden observar que la estructura del cerebro en personas con depresión se ve diferente que en personas que no la padecen. Científicos están trabajando para comprender por qué se dan estas diferencias.

Factores ambientales y psicológicos – traumas, pérdida de un ser querido, una relación difícil, y otros factores estresantes pueden desencadenar la depresión. Científicos están tratando de entender por qué la depresión se presenta en ciertas personas pero no en otras con experiencias iguales o similares. También están estudiando el por qué algunas personas se recuperan de la depresión más rápido que otras.

¿Existe ayuda?

Existe ayuda para quienes sufren de depresión. Aun en los casos más graves, la depresión es altamente tratable. El primer paso es visitar a un médico. Su médico de familia o de una clínica es un buen lugar donde comenzar. El médico puede asegurarse de que los síntomas de la depresión no sean provocados por otra condición médica. El médico puede referirlo a un profesional de la salud mental.

Los tratamientos más comunes para la depresión son la psicoterapia y la medicación.

Psicoterapia

Varios tipos de psicoterapia o «terapia de diálogo», pueden ayudar a las personas con depresión.

Existen dos tipos principales de psicoterapia que se utilizan habitualmente para el tratamiento de la depresión: la terapia cognitivo-conductual y la terapia interpersonal. La terapia cognitivo-conductual enseña a las personas a cambiar estilos negativos de pensamiento y de comportamiento que pueden contribuir a su depresión. La terapia interpersonal ayuda a las personas a entender y resolver relaciones personales problemáticas que pueden causar o empeorar su depresión.

La psicoterapia puede ser la mejor opción para tratar la depresión leve a moderada. Sin embargo, para casos graves de depresión o para ciertas personas, la psicoterapia puede no ser suficiente. Para los adolescentes, una combinación de medicamentos y psicoterapia puede ser lo que mejor funcione para tratar la depresión grave y ayudar a evitar que esta reaparezca. Además, en un estudio sobre el tratamiento de la depresión en ancianos se descubrió que quienes mejoraron por medio de la medicación y de la terapia interpersonal tenían menos probabilidades de volver a sufrir de depresión si continuaban su tratamiento combinado durante, al menos, dos años.

Medicamentos

Los medicamentos ayudan a equilibrar las sustancias químicas del cerebro llamadas neurotransmisores. Aunque científicos no están seguros de la forma exacta en como estas sustancias químicas funcionan, sí saben que afectan el estado de ánimo de una persona. Entre las clases de medicamentos antidepresivos que ayudan a mantener los neurotransmisores en sus niveles adecuados se encuentran las siguientes:

  • Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina
  • Inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina
  • Inhibidores de la monoamino oxidasa

Terapia Natural: Hierba de San Juan
El extracto de hierba de San Juan (Hypericum perforatum), un arbusto silvestre de flores amarillas, ha sido utilizado durante siglos en muchos remedios caseros y herbales. Los Institutos Nacionales de la Salud dirigieron un estudio clínico para determinar la efectividad de la hierba en el tratamiento de adultos con depresión grave. El estudio, que abarcó a 340 pacientes a quienes se les había diagnosticado depresión grave, descubrió que la hierba de San Juan no tuvo más efecto que una «píldora de azúcar» (placebo) en el tratamiento de la depresión grave. Sin embargo, en otro estudio se está investigando si la hierba de San Juan es efectiva en el tratamiento de la depresión leve o menor.

Sea cual sea la razón que te lleva a deprimirte, tienes que tomar “los toros por lo cuernos” y enfrentar esta situación. Entiende que cualquier persona está propensa a sufrir de depresión. Lo importante es buscar ayuda. Visita tu medico antes de que esta condición se robe tus mejores momentos. Buscar tratamiento es una decisión inteligente que requiere fuerza. Los trastornos del estado del ánimo no son defectos ni debilidades. Buscar tratamiento significa que la persona ha tenido el valor de sentirse mejor. ¡Valórate!

*Fuente: Biblioteca Nacional de Estados Unidos, Institutos Nacionales de la Salud (NIH)